Como organizar el amor
Lava roja, lava negra, lava blanca
y tus manos que trabajan el cuerpo.
Optas por el mandato del sol
para navegar abiertamente el laberinto
y redimir la promesa.
Ayer te regalé luz y lluvia para que aplaques
al dios de la soledad;
cuando recibas este fragmento de fuego
crea luz y crea vida.
El caudal irá arrullando cada uno
de los recodos sedientos,
elegantes instintos
y hoy, en estos instantes de fondo,
más allá del bien y el mal,
estaremos nítidamente unidos,
luego de pronunciar el voto solemne
que humedece el viento,
gozo a la vez supremo y absurdo.
Lava roja, lava negra, lava blanca
y tus manos que trabajan el cuerpo.
Optas por el mandato del sol
para navegar abiertamente el laberinto
y redimir la promesa.
Ayer te regalé luz y lluvia para que aplaques
al dios de la soledad;
cuando recibas este fragmento de fuego
crea luz y crea vida.
El caudal irá arrullando cada uno
de los recodos sedientos,
elegantes instintos
y hoy, en estos instantes de fondo,
más allá del bien y el mal,
estaremos nítidamente unidos,
luego de pronunciar el voto solemne
que humedece el viento,
gozo a la vez supremo y absurdo.