Resaca
Mañana apacentaré mi cruda.
De regreso me esperan los días de la semana
como siete hijos.
El espejo me señala.
La sonrisa duda
hasta quedar en una tonta mueca.
Sobreviviré cueste lo que cueste.
El cuerpo aguanta.
El espíritu también hace lo suyo.
Mañana apacentaré mi cruda.
De regreso me esperan los días de la semana
como siete hijos.
El espejo me señala.
La sonrisa duda
hasta quedar en una tonta mueca.
Sobreviviré cueste lo que cueste.
El cuerpo aguanta.
El espíritu también hace lo suyo.