Y si acaso de mi acento
Y si acaso de mi acento
se enojase vuestro oído,
con esto habré conseguido
el daño y el escarmiento;
que es eminente mi intento
y, ardua, su empresa es constante;
mas me llamáis vuestro amante,
y fuera grande injusticia
que mi ignorancia o malicia
faltare a serlo un instante.
Y si acaso de mi acento
se enojase vuestro oído,
con esto habré conseguido
el daño y el escarmiento;
que es eminente mi intento
y, ardua, su empresa es constante;
mas me llamáis vuestro amante,
y fuera grande injusticia
que mi ignorancia o malicia
faltare a serlo un instante.