Laberinto
Dios cambia de color sin previo aviso.
Se ha vuelto negro en medio de mi viaje
tallando en laberinto mi paisaje
y nunca entenderé por qué lo hizo.
Esta es la enredadera de la vida
que asciende, dando paso a espina y nudo.
En medio de la noche estoy desnudo
golpeando contra puertas de salida.
Dios cambia de color y nadie sabe
cuánto perdurará su dios oscuro
–el mío me ensombrece ya por años–.
Quizás antes que el tiempo se me acabe
regrese mi dios blanco y quiebre el muro
donde he pintado tantos desengaños.
Dios cambia de color sin previo aviso.
Se ha vuelto negro en medio de mi viaje
tallando en laberinto mi paisaje
y nunca entenderé por qué lo hizo.
Esta es la enredadera de la vida
que asciende, dando paso a espina y nudo.
En medio de la noche estoy desnudo
golpeando contra puertas de salida.
Dios cambia de color y nadie sabe
cuánto perdurará su dios oscuro
–el mío me ensombrece ya por años–.
Quizás antes que el tiempo se me acabe
regrese mi dios blanco y quiebre el muro
donde he pintado tantos desengaños.