Jinete
Yo quería destrozar en la cruz de tus ojos
el agua retumbante de la matriz del cielo,
para verte en la noche, casi toda de hielo
prodigando a la tierra solamente despojos.
Con los que te adoraban estaba yo de hinojos
admirando grabados de un hermoso pañuelo,
que disfrutaban pocos, y tú con gran recelo
guardabas en el Cuarto de los Siete Cerrojos.
Venir yo de tan lejos con esta voz suicida
en busca del Edén que tu alma refería
en una historia larga por todos conocida...
Y encontrar en tu juicio muerta la luz del día;
¡Porque comiste el fruto del Árbol de la Vida
y un hechizo cayó en tu sabiduría!
Yo quería destrozar en la cruz de tus ojos
el agua retumbante de la matriz del cielo,
para verte en la noche, casi toda de hielo
prodigando a la tierra solamente despojos.
Con los que te adoraban estaba yo de hinojos
admirando grabados de un hermoso pañuelo,
que disfrutaban pocos, y tú con gran recelo
guardabas en el Cuarto de los Siete Cerrojos.
Venir yo de tan lejos con esta voz suicida
en busca del Edén que tu alma refería
en una historia larga por todos conocida...
Y encontrar en tu juicio muerta la luz del día;
¡Porque comiste el fruto del Árbol de la Vida
y un hechizo cayó en tu sabiduría!