Nihil organum
Aquí, en la oscuridad, tal vez estoy.
No me busquéis en el día.
Aquí, en la oscuridad, invisible camino,
oyendo otros pasos detrás, cercanos, dolorosos.
Es el dolor de pensar. Es lo sombrío de ser.
Inaudibles, humedad del árbol, ala fría.
He dejado mi cuerpo en algún sitio.
No puedo mirar. Ya mirar no existe.
Hay el rodar de un secreto, la consistencia de un agua.
De un agua confundida con un aire.
Silencio. Silencio. Perduro en los pasos que me siguen.
En los pasos que siguen a esos pasos.
Equivalente, pensativo, oscuro.
Una vez brillaron los bordes del canto.
No eran todavía No: “dios mío”. No.
Otra vez no.
Si es era fuese negada.
¿Cómo sobrevivir a este dilema?
¿Cómo cómo?
Sombra desalada. Perplejidad que no se encuentra con el fin.
Huida a lo tremendo.
¿Quiénes soy?
Lárfiala.
Lalarfala
Aírfala.
Confiar de lo nocturno.
Cantar de lo fortuito.
Aquí, en la oscuridad, tal vez estoy.
No me busquéis en el día.
Aquí, en la oscuridad, invisible camino,
oyendo otros pasos detrás, cercanos, dolorosos.
Es el dolor de pensar. Es lo sombrío de ser.
Inaudibles, humedad del árbol, ala fría.
He dejado mi cuerpo en algún sitio.
No puedo mirar. Ya mirar no existe.
Hay el rodar de un secreto, la consistencia de un agua.
De un agua confundida con un aire.
Silencio. Silencio. Perduro en los pasos que me siguen.
En los pasos que siguen a esos pasos.
Equivalente, pensativo, oscuro.
Una vez brillaron los bordes del canto.
No eran todavía No: “dios mío”. No.
Otra vez no.
Si es era fuese negada.
¿Cómo sobrevivir a este dilema?
¿Cómo cómo?
Sombra desalada. Perplejidad que no se encuentra con el fin.
Huida a lo tremendo.
¿Quiénes soy?
Lárfiala.
Lalarfala
Aírfala.
Confiar de lo nocturno.
Cantar de lo fortuito.