Guardabarranco
Oí su canto en la espesura de la montaña
y posaron sus alas en la gravedad de mi nombre.
Desde entonces mi existencia
picotea allá en el fondo de la vida
la rama del mundo donde anida mi estrella.
Oí su canto en la espesura de la montaña
y posaron sus alas en la gravedad de mi nombre.
Desde entonces mi existencia
picotea allá en el fondo de la vida
la rama del mundo donde anida mi estrella.