Todavía estaba allí
Cuando despertó, el dinosaurio
todavía estaba allí.
Augusto Monterroso.
Cuando despertó el tiempo, todavía era errante:
No era ángel; apenas un símbolo de granito.
Vino la luna sobre la noche. El ángel estaba allí
Tocando, descubriendo, la lluvia del otoño.
Cuando el tacto despertó, encontró allí finitud de poros
Y un henchido crepúsculo entre las manos.
Cuando desperté, las palabras eran el cuerpo
Entre el tormentoso martirio de la Nada.
Cuando desperté, aún soñaba el Evangelio según Jesucristo;
Después anduve cargando la cruz por el Calvario.
Cuando otros despertaron, vi. un gran espejo-ciudad
Donde vivió Kafka y Edgar Alan Poe.
Cuando desperté, vi que la tierra me devoraba:
Eran el Ser y la Nada.
Era la ciudad que está allí, última de la vida…
Cuando desperté, en realidad, aquí no era el Paraíso.
Cuando despertó, el dinosaurio
todavía estaba allí.
Augusto Monterroso.
Cuando despertó el tiempo, todavía era errante:
No era ángel; apenas un símbolo de granito.
Vino la luna sobre la noche. El ángel estaba allí
Tocando, descubriendo, la lluvia del otoño.
Cuando el tacto despertó, encontró allí finitud de poros
Y un henchido crepúsculo entre las manos.
Cuando desperté, las palabras eran el cuerpo
Entre el tormentoso martirio de la Nada.
Cuando desperté, aún soñaba el Evangelio según Jesucristo;
Después anduve cargando la cruz por el Calvario.
Cuando otros despertaron, vi. un gran espejo-ciudad
Donde vivió Kafka y Edgar Alan Poe.
Cuando desperté, vi que la tierra me devoraba:
Eran el Ser y la Nada.
Era la ciudad que está allí, última de la vida…
Cuando desperté, en realidad, aquí no era el Paraíso.