Fulgor y piÉlago
Era extraño el resplandor en la noche
de palmeras doradas,
el salitre acariciaba las fosas,
exacerbando sonidos antiguos.
Los ojos contemplan, a distancia,
efectos tridimensionales de ensueño.
La algarabía de los pelícanos de yeso
indica las certezas del amanecer.
Permanecemos de pie, sin embargo.
Era extraño el resplandor en la noche
de palmeras doradas,
el salitre acariciaba las fosas,
exacerbando sonidos antiguos.
Los ojos contemplan, a distancia,
efectos tridimensionales de ensueño.
La algarabía de los pelícanos de yeso
indica las certezas del amanecer.
Permanecemos de pie, sin embargo.