Graduado en Derecho, su vida profesional está vinculada a la enseñanza, en la Facultad de Humanidades, de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
Forma parte de la generación del 48 junto con Alberto Peña Lebrón, Máximo Avilés Blonda, Abel Fernández Mejía, Rafael Valera Benítez, Héctor Pérez Reyes, Heriberto Bobadilla Beras, entre otros. Abelardo Vicioso es un escritor más emotivo que cuidadoso en su estilo. Su libro de poemas La lumbre sacudida obtuvo el Premio Nacional Gastón F. Deligne en 1958.
Entre sus obras destacan La lumbre sacudida (1957), Colección el silbo vulnerado (1958), Santo Domingo en las letras coloniales (1978), El freno hatero en la literatura dominicana (1970), 100 poemas de intenso vivir (1990).
la soledad no es mía
No soy yo, somos todos los que ardemos con los corazones en la boca, mordiendo sus tejidos hasta la ...[leer completo]
No soy yo, somos todos los que ardemos con los corazones en la boca, mordiendo sus tejidos hasta la ...
canto al fondo del mar
Mar a donde nos llegan gruesas lluvias amargas. Mar sin olas, sin playas ni veleros distantes. Mar d...[leer completo]
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más cerca de la tierra
Yo traigo una palabra y una muerte dormida en la palabra, traigo un día confuso entre los dedos y un...[leer completo]
Yo traigo una palabra y una muerte dormida en la palabra, traigo un día confuso entre los dedos y un...
canto a santo domingo vertical
Ciudad que ha sido armada para ganar la gloria, Santo Domingo, digna fortaleza del alba, Hoy moran e...[leer completo]
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repudio de la soledad
Si me sumerjo en las aguas oceánicas que rodean la isla en cuyo polvo floto como un cadáver, si este...[leer completo]
Si me sumerjo en las aguas oceánicas que rodean la isla en cuyo polvo floto como un cadáver, si este...
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