A la soledad de un mal de amor
Ven a mi soledad... que no hay espejos
en donde no me mire yo sin verte,
que es oscura la luz cuando te marchas
y sabe a pan el hambre cuando vienes...
Ven a mi soledad... Que tu palabra
descerraje el silencio para siempre,
que el arado temprano de tus besos
ponga un sueño de surcos en mi frente.
¡Ven a poblar la casa en que no habito
y aventa la ceniza de mis sienes,
que no quiero esperar toda una vida
a que se llame como tú la muerte...!
Ven a mi soledad... que no hay espejos
en donde no me mire yo sin verte,
que es oscura la luz cuando te marchas
y sabe a pan el hambre cuando vienes...
Ven a mi soledad... Que tu palabra
descerraje el silencio para siempre,
que el arado temprano de tus besos
ponga un sueño de surcos en mi frente.
¡Ven a poblar la casa en que no habito
y aventa la ceniza de mis sienes,
que no quiero esperar toda una vida
a que se llame como tú la muerte...!