A los 18 años dio a conocer su primera obra en lengua gallega, titulada Fisterre. Publicó en 1954 A modo de esperanza, que recibió el Premio Adonais. De 1960 son sus Poemas a Lázaro, Premio de la Crítica catalana. En Sobre el lugar del Cántico se incluyen poemas de los dos libros anteriores. A partir de 1966, con La memoria y los signos, se produce un cambio en su producción, que se va orientando cada vez más a una búsqueda dentro del propio ámbito del lenguaje poético, como lo demuestran Siete representaciones (1967), Breve son (1968), Presentación y memorial para un documento, El inocente (1970). "El uniforme del general", cuento incluido en el volumen El número trece, le valió ser sometido a Consejo de Guerra en 1972 por considerar que contenía alusiones ofensivas al Ejército.
Otras obras importantes son Treinta y siete fragmentos, Punto cero, El fin de la edad de plata. Nueve enunciaciones (1973), y la antología Sete cantigas de alén (1981), que reúne los poemas escritos en lengua gallega. Entre sus textos teóricos figuran Las palabras de la tribu; el dedicado a la obra de san Juan de la Cruz (Hermenéutica y mística); y Variaciones sobre el pájaro y la red (1991), una serie de ensayos acerca de Miguel de Molinos, Santa Teresa, Grünewald y el Bosco. Entre otras obras destacan Al dios del lugar (1989), No amanece el cantor (1992) y El fulgor: Antología poética (1953-1996).
Recibió en 1984 el Premio de la Fundación Pablo Iglesias. Compartió en 1988 con Carmen Martín Gaite el Premio Príncipe de Asturias de las Letras. En 1998 le fue otorgado el Premio Reina Sofía de Poesía. José Ángel Valente ha sido calificado como el "poeta de la mística y el silencio". Murió en Ginebra el 18 de julio de 2000.
el fulgor (i)
En lo gris, la tenue convicción del suicidio. El verano tenía la piel húmeda. Se pegaba secreta en l...[leer completo]
En lo gris, la tenue convicción del suicidio. El verano tenía la piel húmeda. Se pegaba secreta en l...
el bosque
To a green thought in a green shade. Andrew Marvell El espesor del bosque su verde l...[leer completo]
To a green thought in a green shade. Andrew Marvell El espesor del bosque su verde l...
la lentitud de la destrucción...
La lentitud de la destrucción, sus prolongados hilos húmedos, el odio con retráctiles pupilas amaril...[leer completo]
La lentitud de la destrucción, sus prolongados hilos húmedos, el odio con retráctiles pupilas amaril...
serán ceniza...
Cruzo un desierto y su secreta desolación sin nombre. El corazón tiene la sequedad de la piedr...[leer completo]
Cruzo un desierto y su secreta desolación sin nombre. El corazón tiene la sequedad de la piedr...
el amor está en lo que tendemos
El amor está en lo que tendemos (puentes, palabras). El amor está en todo lo que izamos (risas, band...[leer completo]
El amor está en lo que tendemos (puentes, palabras). El amor está en todo lo que izamos (risas, band...
sé tú mi límite
Tu cuerpo puede llenar mi vida, como puede tu risa volar el muro opaco de la tristeza. Una sola pala...[leer completo]
Tu cuerpo puede llenar mi vida, como puede tu risa volar el muro opaco de la tristeza. Una sola pala...
sólo el amor
Cuando el amor es gesto del amor y queda vacío un signo solo. Cuando está el leño en el hogar, mas n...[leer completo]
Cuando el amor es gesto del amor y queda vacío un signo solo. Cuando está el leño en el hogar, mas n...
Ácida luz...
Ácida luz partida, ciudad hipócrita donde nada se anuncia duradero sino la mezquindad. ¿Sembrar aquí...[leer completo]
Ácida luz partida, ciudad hipócrita donde nada se anuncia duradero sino la mezquindad. ¿Sembrar aquí...
conviene retirarse...
Conviene retirarse tenuemente del espectáculo al que nunca se ha accedido, filtrar debajo de las pue...[leer completo]
Conviene retirarse tenuemente del espectáculo al que nunca se ha accedido, filtrar debajo de las pue...
oda a la soledad
Ah soledad, Mi vieja y sola compañera, Salud. Escúchame tú ahora Cuando el amor Como por negra magi...[leer completo]
Ah soledad, Mi vieja y sola compañera, Salud. Escúchame tú ahora Cuando el amor Como por negra magi...
el vuelo
Ahora no tienes, corazón, el vuelo que te llevaba a las más altas cumbres. Lates, reptante, entre la...[leer completo]
Ahora no tienes, corazón, el vuelo que te llevaba a las más altas cumbres. Lates, reptante, entre la...
pero no más allá
Pero no más allá, no debo herirte, no debo herirte más cuando me acerco con palabras de amor hasta l...[leer completo]
Pero no más allá, no debo herirte, no debo herirte más cuando me acerco con palabras de amor hasta l...
el deseo era un punto inmóvil
Los cuerpos se quedaban del lado solitario del amor como si uno a otro se negasen sin negar el deseo...[leer completo]
Los cuerpos se quedaban del lado solitario del amor como si uno a otro se negasen sin negar el deseo...
el sur como una larga...
El sur como una larga, lenta demolición. El naufragio solar de las cornisas bajo la putrefacta somb...[leer completo]
El sur como una larga, lenta demolición. El naufragio solar de las cornisas bajo la putrefacta somb...
materia
Convertir la palabra en la materia donde lo que quisiéramos decir no pueda penetrar más allá de lo q...[leer completo]
Convertir la palabra en la materia donde lo que quisiéramos decir no pueda penetrar más allá de lo q...
noche primera
Empuja el corazón, quiébralo, ciégalo, hasta que nazca en él el poderoso vacío de lo que nunca podrá...[leer completo]
Empuja el corazón, quiébralo, ciégalo, hasta que nazca en él el poderoso vacío de lo que nunca podrá...
el fulgor (xxxv)
La aparición del pájaro que vuela y vuelve y que se posa sobre tu pecho y te reduce a grano, a grumo...[leer completo]
La aparición del pájaro que vuela y vuelve y que se posa sobre tu pecho y te reduce a grano, a grumo...
el temblor
La lluvia como una lengua de prensiles musgos parece recorrerme, buscarme la cerviz, bajar, lamer el...[leer completo]
La lluvia como una lengua de prensiles musgos parece recorrerme, buscarme la cerviz, bajar, lamer el...
Continúe en Poemas de ANÓNIMO »»»
Esta es la página 1 de un total de 1
