Imponderable irisación... (fauvista)
IMPONDERABLE IRISACIÓN
(((Fauvista)))
Al verde yo enrojecí,
luces y sombras hemos dejado,
ya plateadas ya doradas. ¡Ya hoy!.
¡Ah, sí!. Fosfóricos anhelos esplendentes.
Azuloso porque rugía violáceo,
lo que añil moría verdoso,
en la selva exhausta, infausto fasto.
Y vaya… ¡Qué te amó tierna!.
Porque rosado el suelo palidece,
humedamente amarillando seco.
¡Leonino, atigrador, leopardino!.
¡Pálpalo!. Cada olor grisáceo brillando.
Anuda el vuelo de aquél canto, dulce,
y cuéntalo rojizo al reverdecer, agrio,
la sequía cosechando blancuzca, sal.
¡Estalla!... Solo pierde menos nieblas.
Desdibuja al mismo abstracto metálico,
al depredar azul, al veraz artero sangre,
de raigambre rubicunda expeditiva luz,
egregia hematita, lúgubre esponjosidad.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
IMPONDERABLE IRISACIÓN
(((Fauvista)))
Al verde yo enrojecí,
luces y sombras hemos dejado,
ya plateadas ya doradas. ¡Ya hoy!.
¡Ah, sí!. Fosfóricos anhelos esplendentes.
Azuloso porque rugía violáceo,
lo que añil moría verdoso,
en la selva exhausta, infausto fasto.
Y vaya… ¡Qué te amó tierna!.
Porque rosado el suelo palidece,
humedamente amarillando seco.
¡Leonino, atigrador, leopardino!.
¡Pálpalo!. Cada olor grisáceo brillando.
Anuda el vuelo de aquél canto, dulce,
y cuéntalo rojizo al reverdecer, agrio,
la sequía cosechando blancuzca, sal.
¡Estalla!... Solo pierde menos nieblas.
Desdibuja al mismo abstracto metálico,
al depredar azul, al veraz artero sangre,
de raigambre rubicunda expeditiva luz,
egregia hematita, lúgubre esponjosidad.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
