Peregrino en la tierra - Poemas de CÉSAR LACAYO

Poemas » cesar lacayo » peregrino en la tierra

Peregrino en la tierra

Peregrino en  la tierra cantando melodias donde suben  los hombres a nacer dentro  de
un  corazón.  Peregrino proveniente  de  otras tierras.  Extranjero.
Caminante. Visitante. Huésped que con el día, va retornando hacia el
dormido sol sobre la  montaña; para volver a  nacer y caminar en  el
nacimiento de  otro día,  como el  río de  luz y  lluvia con  que el
invierno besa y cubre la semilla, para que la primavera la  descubra
en  su nueva  explosion de  fruto y  de color,  y en  el otoño,  se
desprende la hoja de la rama, y salta para hablarle al viento, y  el
viento le canta, la mece, y la arrulla, en su viaje hasta el  suelo,
alcanza la fecunda  madre tierra, y  la tierra la  abraza, queriendo
aproximarla más  y más  a su  silencioso corazón,  y luego, entre el
amor y la sabia, sube la genética de una cancion de células y  vida,
y va naciendo  la hierba, para  llenar el verdor  del verano, en  un
círculo de amor interminable:  vegetal, mineral y cósmico  dentro de
una misma canción de universo,  como en el principio cuando  Dios se
movía sobre el silencio y los espacios infinitos, y de sus  palabras
nacieron las estaciones, los mundos  y la tierra; y el  espíritu del
hombre  brotó  del  Espiritu de  Dios,  hundido  en las  eternidades
celestes. Mientras el movimiento, la materia y la energía fusionaban
espacios dentro de otros espacios, al nacimiento de los mundos y los
astros. La grandeza está más allá de la mente que pesa y se proyecta
con  la agilidad  relampagueante de  la luz.  Es como  fruta madura
desprendida de la  rama o luz  de nebulosa retratando  el resplandor
inmenso de la constelación. El  espíritu está en la bellota  que cae
al corazón para alcanzar la  vida. Develar sus secretos y  descubrir
la simiente  de la  inmortalidad dentro  del hombre;  grabada en los
pergaminos del corazón. Peregrino en  la tierra para cantar bajo  el
viento una canción de vida. Peregrino en la tierra con las manos del
día, donde  el sol  de otros  mundos, va  naciendo en  mis manos. Mi
corazón palpita en  el vuestro y  en la misma  morada, bajo el  sol,
bajo el día, hacia el atardecer,  hijo de un mismo corazón y  de una
misma tierra, cubiertos por un mismo sol, la misma lluvia, la  misma
sangre  y el  mismo amor.  Dentro de  una misma  ciudad y  un mismo
universo.

Sobre esta web
Esta web ha sido creada gracias a la colaboración de amigos que nos han ofrecido sus poemas y selecciones.
Poesia
- Poemas - Contáctenos - Privacidad -
© 2006-2023 PoetasPoemas.com - Poesía hispanoamericana y traducciones al español.